Miércoles 3 de Febrero de 2010, 02:35

No habrá presos por la tragedia de Lapa

| El Tribunal Oral Federal 4 debió suspender la lectura del veredicto a raíz de los gritos de los familiares, ya que seis de los ocho imputados fueron absueltos , entre ellos, Gustavo Deutsch, presidente de la compañía y Rolando Boyd, vice. También fueron sobreseídos Diego Lentino y Damián Peterson, ambos de la Fuerza Aérea. Gabriel Borsani y Valerio Diehl fueron condenados a tres años de prisión en suspenso .

El fallo del Tribunal Oral Federal (TOF) 4 generó ira entre las víctimas, sobrevivientes y familiares de los muertos, cuya reacción, con golpes a vidrios e insultos a jueces y acusados por igual obligó a suspender la lectura del veredicto durante algunos minutos, en medio de forcejeos con la policía. Diez años, seis meses y tres días después del accidente, y a cuatro meses de su prescripción, el TOF 4 encontró penalmente responsables de los delitos de "estrago culposo agravado" al ex gerente de operaciones Valerio Dhiel y al jefe de línea de los aviones Boeing 737, Gabriel Maria Borsani. Ninguno de los dos irá preso, pero deberán reportar su domicilio regularmente en tribunales durante dos años, según el fallo que, se aclaró, fue decidido por la mayoría conformada por los jueces Leopoldo Bruglia y Jorge Gorini. La magistrada Maria Cristina Sanmartino votó en disidencia y, según trascendidos de Tribunales, era partidaria de una mayor dureza en las condenas. Unos seis minutos después de la lectura del veredicto, a cargo del secretario del tribunal, Eduardo Méndez, los mas exaltados comenzaron a golpear los blindex que los separaban de los acusados, cuando se anunció que Gustavo Deutsch, dueño de la compañía, y su segundo, Ronald Boyd, habían quedado absueltos de culpa y cargo. La noticia, al cabo de 23 meses de audiencias y 1.200 testigos, cayó como un balde de agua helada sobre un centenar de familiares y amigos de las víctimas, identificados con remeras negras con la inscripción "Cárcel por 65 condenas a muerte". "No hay otra forma de denominar a este fallo que como una burla", dijo llorosa ante los camarógrafos que coparon el lugar Marisa Beiro, una sobreviviente del vuelo 3142, quien perdió a siete amigas con las que viajaba y sufrió graves quemaduras y lesiones, cuyas huellas persisten en su rostro. Otros lloraban y pateaban el piso, mientras la policía clausuró las puertas del recinto y debió forcejear con decenas de camarógrafos que quedaron ubicados lejos de la protesta y pugnaban a empellones con policías y custodias por entrar. La absolución de los principales responsables de la empresa y de los dos miembros de la fuerza aérea que eran responsables de las habilitaciones de empresas y personal en aquellos años fue celebrado discretamente por el ejército de abogados contratados para su defensa, encabezados por Jorge Sandro y Mariano Fragueiro Frías. La única mala noticia que les significó a ellos este fallo, fue que deberán pagar una multa individual de 35 mil pesos, extensiva a Estévez Cambra. El ex ministro de Defensa del gobierno de Carlos Menem, Humberto Romero, amigo personal de Deutsh, se ubicó en las bandejas superiores. El abogado Hugo Wortman Jofre, patrocinante de la Asociación de Víctimas fracasó en su intento para que el hecho fuera tipificado como un estrago doloso, es decir con intención, cuyas penas hubieran subido hasta 20 años de prisión efectiva, pero elogió que se hubiera aplicado una sanción al tercero en la línea. Los fundamentos del fallo serán conocidos el 31 de marzo próximo a las 21.30 y se supone que en ellos los jueces colocaron las mayores responsabilidades en el fallecido piloto Guillermo Weigel. Según los diálogos registrados por la "caja negra", Weigel no configuró adecuadamente los alerones (flaps) de la nave, lo que la hizo estrellar sin poder despegar. El ex piloto de LAPA Enrique Piñeyro dijo esta noche, tras conocer el fallo, que "la impericia" del comandante, como causa de la tragedia, es un argumento "cómodo" y preguntó "quién lo promovió" para desempeñar esa función, si no estaba capacitado para cumplirla. "No hay fallo técnico que me pueda convencer" de que el accidente se debió a eso, ya que despegar y mantener la altura de un avión es "lo mínimo" que enseñan en un aeroclub, alegó Piñeyro, quien cuestionó severamente la política de la empresa en la película "Whisky, Romeo, Zulu", que dirigió y protagonizó. Fuente: Télam.