| Productores rurales reiteraron ayer su queja por la escasez y el aumento de precios de gasoil que, por cuarta campaña consecutiva, pegaron un duro golpe al sector agropecuario y pusieron en riesgo la posibilidad de marcar un récord de 100 millones de toneladas este año.
El sector agropecuario es el que más consume gasoil, con cerca de 4.780 millones de litros anuales, además de experimentar un ritmo de expansión de entre 2 y 3 % anual, según estimaciones de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).
Agrava la situación del campo que el faltante de gasoil siempre coincide con la época del año en que el sector aumenta considerablemente su producción, que garantiza el abastecimiento de alimentos y productos en el mercado interno.
Por ejemplo, este año —por cuarto consecutivo—, la escasez de gasoil coincidió con el momento en que se estaba sembrando más de un 30 por ciento de maíz, casi el 20 por ciento de girasol y se comenzaba con la soja.
Además, el campo comenzará pronto con la cosecha de trigo, por eso, los ruralistas advierten que “las posibilidades de ocasionar demoras en estas actividades, con pérdidas económicas para el productor, está latente”.
Así, el faltante de gasoil está demorando la continuidad de la siembra del maíz y girasol, el inicio de la de soja y genera dudas respecto de la inminente recolección de trigo.
Según el sondeo realizado por CRA, se advierte escasez de combustible en Buenos Aires, Entre Ríos, Córdoba, Chaco, Formosa, Tucumán, Santiago del Estero y Corrientes, entre otras provincias.
Además, se comercializa con valores promedio de entre 2,20 pesos por litro y hasta 2,80 pesos.
Los precios del combustible aumentan a medida que crece la demanda de volumen, además de que los productores denuncian mala calidad en el gasoil expendido en diversas provincias, lo que trae aparejado elevados costos en mantenimiento de motores de vehículos y de maquinaria agrícola.
