Domingo 18 de Enero de 2009, 12:45

Pondrían la lupa sobre las cajas de seguridad para detectar pos

| La medida sería importante ya que muchos usuarios de cajas de seguridad no solo guardan en ellas joyas y herencias familiares, sino también divisas extranjeras que no están blanqueadas en el mercado argentino, según estimaciones oficiales.

Tras lanzar el blanqueo y repatriación de capitales, el Gobierno busca ahora evasores entre unos 500 mil propietarios de cajas de seguridad, trascendió hoy. Al frente de la Administración Federal de Ingresos Públicos, Ricardo Echegaray, estaría evaluando implementar esta medida con la finalidad de detectar "dinero en negro". Muchos usuarios de cajas de seguridad no solo guardan en ellas joyas y herencias familiares, sino también divisas extranjeras que no están blanqueadas en el mercado argentino, según estimaciones oficiales. De allí, la importancia de esta medida, sumada a las ya lanzada repatriación y blanqueo de capitales. De acuerdo con lo publicado en un matutino porteño, serían unos 500 mil los usuarios de cajas de seguridad los que estarían bajo la lupa de la entidad presidida por Echegaray y que recibirían la intimación para que declaren sus contenidos. Tras la crisis de 2001 y el famoso corralito financiero del ex presidente Fernando De la Rúa, muchos ahorristas se volcaron a depositar sus bienes en cajas de seguridad de los bancos privados, en donde conseguir una disponible es casi una tarea imposible de cumplir. Si bien la idea no es que inspectores nacionales abran las cajas y constaten lo que contienen, se pudo saber que la intención es que, a través de una declaración jurada, los dueños detallen los bienes allí guardados. Otra de las medidas en carpeta, sería la de controlar a los propietarios de tarjetas de crédito extranjeras que compran dentro de la Argentina, pero que pagan sus resúmenes en el país de origen del plástico, privando a las arcas oficiales de percibir los impuestos correspondientes. Este año se presenta con ciertas dificultades para cumplir con los compromisos fiscales en un contexto internacional complejo, que arrastró a las ventas externas y el ingreso de divisas, y de allí surge la necesidad del Gobierno de apelar a todas las herramientas disponibles para mantener una recaudación adecuada. Será tarea de Echegaray cumplir con este desafío echando mano sobre estos instrumentos que aún no se habían utilizado por la administración kirchnerista. Fuente: NA.