Miércoles 19 de Enero de 2011, 10:09

Por disposición de la AFIP todos los comercios deberán a

| La Resolución de la AFIP intimará a los comerciantes a instalar los sistemas electrónicos de cobro. La decisión será presentada como una medida en contra de las ventas en negro pero también apunta a paliar la escasez de billetes. Se prevén reacciones negativas de los vendedores minoristas debido a los impuestos extraordinarios de estas operaciones.

La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) dispondrá el pago electrónico en todos los comercios, medida que obligará a los locales a contar con las máquinas denominadas “postnet” para poder operar. De esta forma, el público estará habilitado para pagar en todos los comercios con tarjeta de débito o crédito. La medida abarca a todos los comercios que emitan factura a consumidor final. Por ello, los locales deberán contar con el sistema “postnet” (Postal Numeric Encoding Technique) para que los clientes puedan pagar con tarjeta de débito o crédito. Así lo acordaron los titulares del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, y de la AFIP, Ricardo Echegaray, durante una reunión que en los próximos días continuarán los técnicos de ambos organismos, con el fin de poner en marcha la norma cuanto antes se pueda implementar. Los detalles puntuales de la iniciativa se conocerán con la publicación de la resolución general, en donde las autoridades de la AFIP tienen previsto declarar como "indispensable" la adquisición de los equipos para realizar las transacciones electrónicas. De esta forma, la AFIP cierra el círculo sobre los locales que operan en negro, posibilitándole combatir la evasión en IVA y Ganancias. Asimismo, contribuiría a paliar el déficit de billetes y monedas, al incentivar las transacciones minoristas sin necesidad de contado. Pese al auspicioso marco bajo el cual será presentada, la medida promete cosechar críticas y protestas entre los comerciantes, especialmente entre los que se desempeñan como minoristas y acostumbran expender sus productos al contado. El rechazo tendrá como eje los impuestos extraordinarios que deben pagar los vendedores a instancias del servicio de pago electrónico, como el costo de alquiler del “posnet” y las comisiones de las tarjetas que son descontadas del precio total del insumo. Además de las frecuentes demoras que deben afrontar los comerciantes para cobrar los productos vendidos en cuotas a largo plazo.