Viernes 28 de Agosto de 2009, 10:59

Presidentes de la Unasur debaten en Bariloche sobre las bases militare

| La presidenta Cristina Kirchner será hoy la anfitriona de la reunión especial de mandatarios de la Unasur, convocada de urgencia en San Carlos de Bariloche para dirimir la polémica en torno a la instalación de las bases militares estadounidenses en Colombia.

La ciudad rionegrina comenzó ayer a vivir las horas previas a la cumbre extraordinaria del principal foro sudamericano que se desarrollará en el famoso hotel Llao Llao, situado a 25 kilómetros del Centro Cívico. El arribo de los mandatarios de los doce países comenzó a partir de las 17 y a medida que descendieron en el aeropuerto local fueron trasladados por vía terrestre hasta el hotel, en un tramo de 40 kilómetros bordeando el lago Nahuel Huapi.Cristina Kirchner encabezará oficialmente hoy la recepción de los once mandatarios extranjeros en el hall central del hotel Llao Llao, minutos antes del inicio del encuentro extraordinario que tendrá como tema central el debate por la utilización de bases militares colombianas por parte de Estados Unidos. La tensión regional por la presencia militar estadounidense en Colombia acaparó la discusión de la última Cumbre de la Unasur que se realizó hace 17 días en Ecuador, donde los presidentes Cristina Kirchner y Rafael Correa propusieron dirimir la cuestión en otro encuentro extraordinario. Por ese motivo se aguarda un áspero debate entre los mandatarios, en el que la Argentina y Brasil buscarán imponer una línea moderada, frente a la posturas más radicalizadas de Ecuador, Venezuela y Bolivia, que reclaman el retiro inmediato de esos asentamientos estadounidenses. El mandatario colombiano Álvaro Uribe mantendrá su postura de no dar marcha atrás con la instalación de las bases y defenderá la iniciativa bajo el argumento de que se trata de una “decisión soberana” y que “no afectará a los demás países del continente”.Si bien Cristina Kirchner y el brasileño Luis Inácio Lula Da Silva pusieron reparos al proyecto de las bases militares en Colombia, evitarán quedar alineados con las posiciones más duras del venezolano Hugo Chávez y de Correa, quienes mantienen una tensa relación con Uribe.