"EL GRAN CAPITAN" CUMPLIO DOS AÑOS DE SERVICIO REGULA

La vuelta del ferrocarril se concretó seis meses después de la asunción de Néstor Kirchner a la presidencia de la Nación y bajo el impulso del gobierno de Ricardo Colombi en Corrientes, que otorgó la concesión a la empresa Trenes Especiales Argentinos (TEA), para la explotación del servicio de pasajeros. Esa decisión puso fin a diez años de ausencia, luego de que el gobierno de Carlos Menem resolviera en 1993 el levantamiento de ese ramal, lo que llevó incluso a la desaparición de poblaciones como el caso de Pastor Britos, en la provincia de Entre Ríos. Para muchos pueblos de esa provincia, de Corrientes y de Misiones, el retorno del tren significó una inyección de vida y actividad y el acceso a un servicio económico, considerado por muchos pasajeros como "la única posibilidad para viajar". Para Ricardo Amuy, apoderado legal de TEA, poner nuevamente sobre los rieles al Gran Capitán fue "todo un desafío de esta Pyme familiar, que con capitales propios y sin ningún tipo de subsidio, pudo mantener durante dos años un servicio ininterrumpido". "Nosotros -dijo Amuy a Télam- reparamos las locomotoras y los vagones con fondos propios y no recibimos ningún tipo de ayuda, como sí sucede con las empresas de ferrocarriles de Buenos Aires o con las de colectivos en todo el país". La compañía mantiene "desde hace dos años la misma tarifa social de 35 pesos para el tramo entre Lacroze y Posadas en clase turista" y ha "sobrellevado, a pesar de todos los contratiempos, dos frecuencias semanales de ida y dos de vuelta", señaló. No obstante, Amuy aclaró que los planes "apuntan a una mejora constante de este servicio y en poder concretar finalmente la rehabilitación del tramo entre Monte Caseros y la ciudad de Corrientes". El Gran Capitán parte actualmente los lunes y viernes desde Buenos Aires y retorna los domingos y miércoles desde Posadas, pero a partir del primer día de diciembre, modificará sus días y horarios. El nuevo cronograma contempla salidas de la estación Federico Lacroze los martes y viernes a las 10.50 y, desde Posadas hacia Buenos Aires, los domingos y miércoles a las 19. La duración del viaje es de unas 24 horas, pero el mal estado de las vías, producto de la falta de mantenimiento por parte de la empresa brasilera América Latina Logística, concesionaria del servicio de cargas y del tendido férreo, hace que estos tiempos la mayoría de las veces no se cumpla. En general, los pobladores litoraleños dicen estar "conformes" con el servicio y, aunque reclaman un menor tiempo de viaje, lo defienden: "Ahora que el tren volvió, no vamos a dejar que nos lo vuelvan a sacar", seguró Hugo Jonte, un habitante de Monte Caseros hijo y nieto de empleados del ferrocarril. Fuente: Télam.