Reabrirían exportaciones de carne para los cortes más ca

En el Gobierno hay satisfacción sobre la evolución del precio de la carne. A partir de ello, las exportaciones podrían reabrirse esta misma semana, pero en forma gradual y con condicionantes. Desde el máximo nivel oficial monitorean en forma permanente la evolución de los precios de la carne. Ayer aseguraron en la Casa Rosada que Néstor Kirchner llamó desde San Pablo, poco antes de reunirse con el presidente Lula, para preguntar las últimas novedades sobre el tema. Pero los funcionarios se muestran satisfechos: "Un relevamiento de la Secretaría de Comercio mostró hoy (por ayer) que más del 20 por ciento de las carnicerías ya está aplicando los precios de referencia dictados el jueves para 12 cortes populares —dijeron en Economía—. Y todos los supermercados también lo hacen. Mañana (por hoy) el resto de los carniceros recibirán las reses con el precio de referencia y la aplicación será total". Además, a partir de hoy a la mañana, saldrán a la calle inspectores de la Secretaría de Comercio que preside Guillermo Moreno, para verificar que carnicerías y matarifes cumplan los precios ordenados. Con este panorama, el Gobierno avanza entonces en la reapertura de las exportaciones de carne. "Será un proceso sumamente gradual, pero que podría comenzar esta misma semana", dijo ayer un alto funcionario oficial. "En la medida que las rebajas se hayan expandido a todo el mercado, empieza la apertura", agregó. El primer paso será permitir las exportaciones de la carne ya procesada pero hoy bloqueada, como los contenedores que están en el puerto. Después, de a poco, algunos mercados y algunos cortes. "Los cortes populares que tienen precio de referencia representan el 70% de la vaca —señalan técnicos de Comercio—. El 30% restante tiene precio libre, y esa será la parte que se podrá exportar". En otras palabras, las ventas al exterior se retomarán, pero acotadas al cuarto trasero del animal. "Las exportaciones de los cortes populares seguirán bloqueadas", aseguran los funcionarios. El punto cuenta con la aceptación de los frigoríficos, que además sellaron con el Gobierno otro acuerdo: hacia adelante no se podrá despachar al exterior "más que el 50 por ciento del promedio de lo que se venía exportando". "Es una manera de garantizar el abastecimiento del mercado interno", dicen los privados. Los mercados a los que se vuelva a exportar también tendrán limitaciones. Se irán abriendo de a poco, siguiendo los lineamientos que señale la Cancillería. Pero habrá algunos que continuarán cerrados. Es el caso de Rusia, el mayor importador de carne argentina pero que, al contrario del resto de los países clientes, compra cortes baratos. "Allí no habrá nuevas exportaciones, al menos por ahora, porque es precisamente el tipo de carne que presiona sobre los precios del mercado interno", aseguran analistas oficiales. En el máximo nivel del Gobierno existe cierta preocupación por acelerar la reapertura de las exportaciones de carne. ¿La razón? "Es que no queremos que el precio de la hacienda caiga demasiado, afectando la rentabilidad de los productores?", señalan en los despachos oficiales. Allí está la razón del apoyo al nuevo esquema por parte de Federación Agraria, Sociedad Rural, Coninagro, APEA y casi todas las asociaciones ruralistas. La única que quedaba afuera era CRA. Pero fue justamente la que ayer, por la boca de su vicepresidente, Néstor Roulet, aseguró a Clarín que "la ley de abastecimiento nos parece que es muy difícil de implementar, pero el Gobierno dice que tiene los elementos y nosotros no le vamos a poner palos en la rueda".