| A los fuertes descensos de las bolsas en Europa y Asia, también se sumaron Argentina y Brasil. La debacle se produce a raíz de las preocupaciones que genera la economía norteamericana y el temor a una posible reseción económica. El dólar, por su parte, subió un centavo.
La Bolsa porteña se hundió ayer presa del pánico internacional, ante el temor de una posible recesión económica en los Estados Unidos, que desplomó al índice Merval en 6,27 por ciento para las 42 empresas líderes del mercado.
La ausencia operativa en Wall Street por el feriado en homenaje a Martin Luther King motivó que los mercados asiáticos en la madrugada local, y los europeos durante la mañana y el mediodía, se fueran derrumbando en un operativo cascada alimentado por una generalizada ola de ventas de quienes procuraron quedarse con liquidez antes que soportar mayores quebrantos patrimoniales.
El índice Merval rompió todos los límites de sostén dentro del corto y mediano plazo, y cerró en 1.876,87 puntos, tras haber alcanzado un mínimo de 1.861,12 unidades cuando llegó a caer 7,06 por ciento.
El volumen operativo se redujo notablemente a 52,2 millones de pesos, que se distribuyeron entre acciones y ejercicios sin la intervención de los cedear’s por el feriado estadounidense.
Sobre 56 especies cotizadas se anotaron 55 bajas y un solo avance correspondiente a las acciones de Caputo, con suba de 1,59 por ciento.
El índice Bovespa de Brasil caía 6,62 por ciento, y el de México 4,41 por ciento, junto con el oro y el petróleo que no se salvaron de la debacle.
En medio del nerviosismo que invadió a los mercados, el dólar subió un centavo, a 3,14 pesos para la compra y 3,18 para la venta promedio en las principales casas de cambio y bancos del microcentro porteño.
Así, la divisa estadounidense avanzó 0,3 por ciento respecto del cierre del viernes último.
