Salud | Días pasados el Presidente, Alberto Fernández firmó el Decreto reglamentario de la Ley 27.680 de Prevención y Control de la Resistencia a los Antimicrobianos, que tiene como objetivo fomentar el uso responsable de los medicamentos antimicrobianos y regular cuestiones relacionadas con su expendio y consumo, instando a su utilización únicamente cuando sea estrictamente necesario y bajo prescripción médica.
Según el Ministerio de Salud de la Nación, la nueva reglamentación establece que todas las especialidades medicinales que contengan ingredientes farmacéuticos activos con actividad antimicrobiana sistémica deberán venderse bajo receta archivada, lo que significa que se requerirá una receta médica para su compra, pero no será necesaria la presentación de una receta duplicada.
Carlos Arballo, titular de la Cámara Correntina de Farmacias (CACOFAR), expresó su opinión sobre la legislación y la calificó como "positiva".
En su análisis, Arballo destacó la importancia de evitar el abuso en el consumo de antibióticos, especialmente la preocupante práctica de automedicarse con estos medicamentos, cuyo uso debe ser siempre recomendado por profesionales de la salud.
También hizo referencia a la facilidad con la que algunas personas pueden acceder a antibióticos sin receta, mencionando ejemplos como la amoxicilina, que incluso se encuentra disponible en kioscos. La Ley 27.680 tiene como objetivo principal promover el uso responsable de los antibióticos.
Esto implica no interrumpir los tratamientos con estos medicamentos y utilizarlos solo cuando sean indicados por un profesional de la salud.
Es importante destacar que los antibióticos no son efectivos para tratar infecciones virales, por lo que no deben ser utilizados en esos casos.
Además, la normativa busca prevenir la compra y el consumo de antibióticos sin receta médica.
La Ministro de Salud de la Nación, Carla Vizzoti, explicó que el mal uso de los antimicrobianos puede conducir al desarrollo de mecanismos de resistencia en los microorganismos, lo que significa que los antibióticos pueden volverse ineficaces.
Esta resistencia antimicrobiana se ha convertido en un problema global y ya existen microorganismos multirresistentes e incluso panresistentes, para los cuales no hay ningún antibiótico que pueda tratarlos y curarlos.
Como consecuencia, algunas personas enfrentan enfermedades sin opciones terapéuticas y esto puede llevar a consecuencias fatales.
Según datos de la ONU, la resistencia antimicrobiana se prevé como una de las principales causas de muerte en los próximos años.
La resistencia antimicrobiana es una preocupación mundial que se produce cuando los microorganismos causantes de enfermedades desarrollan resistencia a los medicamentos utilizados para combatirlos.
Se estima que, si no se implementa una respuesta global y coordinada, la resistencia antimicrobiana podría convertirse en la principal causa de muerte a nivel mundial para el año 2050.
El impacto de la resistencia se ha observado de manera acelerada en infecciones bacterianas asociadas a la atención de la salud en pacientes hospitalizados, ya que estas infecciones se vuelven cada vez más resistentes a los antibióticos, lo que limita las opciones de tratamiento disponibles.
La aplicación de la Ley 27.680 en Argentina representa un paso importante para enfrentar esta problemática y buscar soluciones conjuntas con la industria farmacéutica, los medios de comunicación, los profesionales de la salud y las jurisdicciones para garantizar el uso responsable de los antibióticos y combatir la resistencia antimicrobiana.
Con estas medidas, se busca proteger la eficacia de los medicamentos antimicrobianos y preservarlos como herramientas efectivas para el tratamiento de enfermedades infecciosas.
