Lunes 15 de Octubre de 2007, 13:55

Surgieron nuevos pagos irregulares en el caso Skanska

| Los sobreprecios pagados en el marco de la ampliación del Gasoducto del Norte que desencadenó el escándalo conocido como "caso Skanska" suman otros 20 millones de pesos más, de acuerdo a una información periodística difundida ayer.

Según el matutino porteño La Nación, se trata de otro tipo de sobreprecios que alcanzarían ese monto bajo el rubro de costos adicionales y adecuación de los contratos cobrados a fines del año pasado por las tres empresas constructoras Skanska, BTU y Contreras Hermanos. De acuerdo a la versión periodística, BTU recibió un pago adicional de 11 millones de pesos, Contrera Hermanos un total de 6,2 millones y la sueca Skanska 2,6 millones. Antes de comenzar la ampliación del gasoducto a finales de 2005, Transportadora de Gas del Norte (TGN), que es la concesionaria privada de ese gasoducto, había protestado porque las constructoras habían presupuestado con un sobreprecio que alcanzaba los 80 millones de pesos. No obstante, el ente oficial Enargas le ordenó a TGN contratar a esas empresas para iniciar las obras. En este caso, los costos adicionales tienen la particularidad de que, salvo una pequeña excepción en el caso de la constructora sueca Skanska, TGN no habría aprobado los pagos, cuyo visto bueno era indispensable para que el Enargas ordenara a Nación Fideicomisos pagarles a las constructoras. En tanto, BTU, Skanska y allegados a Contreras Hermanos, replicaron que los pagos fueron autorizados por TGN. Ocurre que si no hubo aprobación de esta firma, no son las tres constructoras sino el Enargas y Nación Fideicomisos quienes deberían explicar los pagos. En el caso de Skanska, TGN consignó que habían arribado a un acuerdo parcial para reconocerle un ajuste de precios, pero no aceptó pagar todo lo que la constructora sueca pretendía. Aunque el "caso Skanska" es más conocido por el presunto pago de coimas por 13,4 millones de pesos que esa empresa confesó haber realizado, el de los sobreprecios es el que mueve las cifras más grandes. Esa rama de la causa Skanska estaba a cargo del juez federal Guillermo Montenegro, hasta que presentó su renuncia a la Justicia hace dos semanas.