Lunes 6 de Marzo de 2006, 14:49

TESTIGO DIJO QUE LOS FISCALES LA ENGAÑARON

ROBO DEL SIGLO | La pareja de Alberto De la Torre, uno de los detenidos por el robo al Banco Río de Acassuso, denunció que los fiscales que investigan el hecho la "engañaron" y la "manipularon" y aseguró que se siente "mal anímicamente" y que "preferiría estar muerta".

"Le voy a iniciar juicio a la fiscalía, porque me engañaron, me manipularon, porque me dijeron que mi nombre nunca se iba a conocer y me dijeron que me iba a proteger y no lo hicieron. Fue todo una mentira", dijo la mujer en declaraciones al programa de televisión La Cornisa. La declaración testimonial de esta mujer resultó de vital importancia para los fiscales que investigan el caso, ya que gracias a ella se logró la detención de los dos primeros sospechosos por el hecho, Alberto Rubén De la Torre y su amante Silvia Raquel Fernández. Estos fueron apresados el sábado 18 de febrero pasado, a más de un mes del robo, cuando se movilizaban en una camioneta 4x4 por el partido de Avellaneda y pensaban fugarse al exterior del país. En una casa de un familiar de De la Torre los investigadores hallaron casi un millón de dólares y ocho kilos de joyas que podrían corresponder a parte del botín robado en el banco. Desde entonces se dijo que la detención de De la Torre y Fernández se había producido gracias al testimonio de la pareja del hombre, quien se sintió despechada porque su marido la estaba dejando por otra mujer más joven. Sin embargo, la testigo de identidad reservada dio otra versión y dijo que denunció a su marido porque la amenazó de muerte a ella y a sus hijos y la golpeó. "El (por Alberto De la Torre) me empujó a la vereda de enfrente, sin dejarme opciones. Me puso en un túnel donde la única salida era esa. El me empujó, yo no hubera querido jamás esto", dijo. "Anímicamente estoy mal por todo lo que dicen los medios de mí, que es bastante erróneo, y porque me destruyó mi vida, la de mi familia. Vivo encerrada, no salgo de las rejas", explicó. La mujer dijo que "preferiría estar muerta antes que vivir esto" y señaló que si la mataran le "harían un favor". Por otra parte, denunció que el gobierno bonaerense le ofreció una casa en las afueras de la provincia "para que pudiera vivir tranquila, pero se olvidaron de todo". "El gobernador (Felipe Solá) me había prometido una casa fuera de Buenos Aires para que pudiera iniciar una nueva vida y se quedó en el olvido. Me ofrecieron trabajo para mis hijos y tambien quedó en el olvido", dijo. Fuente: Télam.