Viernes 26 de Septiembre de 2008, 00:36

Una multitud manifestó su devoción en San Nicolás

| Una multitud de peregrinos provenientes de diversas provincias argentinas y países limítrofes, participaron hoy, como todos los años, de la procesión y de los actos religiosos en homenaje a la Virgen del Rosario de San Nicolás, de cuya aparición se celebran 25 años.


La devoción de los fieles alcanzó su punto máximo cuando pasadas las 15 la imagen de la Virgen fue sacada del santuario contiguo a "el campito", nombre con el que se conoce popularmente al lugar donde la vecina Gladys Motta dice haber visto a la imagen mariana hace 25 años. Papelitos, banderas con los colores papales, bombas de estruendo y la algarabía de miles de personas acompañaron el paso de la imagen de la Virgen por las calles de San Nicolás, en una procesión donde los peregrinos se apretujaban para estar lo más cerca posible de la figura religiosa. La imagen de la Virgen fue colocada junto al altar principal para presidir la celebración junto a la imagen de San Nicolás de Bari, patrono de la ciudad, y los fieles los recibieron arrojando pétalos de rosas y con sus pañuelos en alto. El Obispo de San Nicolás, monseñor Héctor Cardelli en su homilía exhortó a los fieles a "abandonar actitudes cómodas y rutinarias" porque "no acogen ni sirven a los hermanos que vienen en búsqueda de respuestas para sus vidas sin sentido o para encontrar alivio en los momentos de dificultad". El prelado recordó que María llegó a San Nicolás "con el vehículo más adaptado a nuestro modo de entender. Sólo eligió a Gladys, una servidora a quien le manifestó su querer y, al conocerlo, la devoción del pueblo lo aceptó con alegría, lo celebró y adhirió a su propuesta". Tras subrayar que los hijos "la quieren recibir en su casa", el pastor nicoleño manifestó la alegría de "que su cúpula nos cobije a todos" y agregó que "esta casa está destinada a ser un lugar de encuentro de todos los hermanos junto a su Madre". La Virgen "nos enseña la importancia que tiene en la vida del discípulo la escucha de la Palabra" y nos revela "que sus pensamientos están en sintonía con los de Dios y que su querer es un querer junto a Dios". Indicó además que "su fuerte presencia en nuestras comunidades enriquece la dimensión materna de la Iglesia, y su actitud acogedora la convierte en casa y escuela de comunión y en espacio espiritual que prepara para la misión". Miles de personas partieron desde sus provincias desde hace varios días para asegurar su presencia en la celebración del cumpleaños número 25 de la Virgen de San Nicolás y, entre los más numerosos, se podía ver a gente de San Juan y de Mendoza, que llevaban carteles en el que reflejaban su devoción mariana. Los organizadores manifestaron que unos 4.000 micros llegaron a la ciudad desde hace uan semana, además de cientos de vehículos particulares, por lo que las autoridades municipales dispusieron un operativo especial para poder recibir a la multitud. Por su parte, la intendencia de San Nicolás -que conduce Marcelo Carignani- puso a disposición 600 personas de la municipalidad para colaborar en las tareas de asistencia a los peregrinos, mientras que unos 5.000 efectivos de la policía bonaerense se encargaron de la seguridad junto con un helicóptero y la división caballería. La imagen de la Virgen, de unos dos metros de altura, partió desde el santuario acompañada por sacerdotes, al tiempo que familias enteras saludaban su paso por las calles de San Nicolás en un clima de gran hospitalidad en el que los vecinos abrían las puertas de sus casas a los peregrinos que necesitaban asistencia. Carlos Pérez, actual rector diocesano del santuario y cura párroco en la catedral de San Nicolás al momento de la aparición de la Virgen María hace 25 años, dijo a Télam que la peregrinación "es la manifestación del paso de Dios por este pueblo". El sacerdote dijo que "se trata de una virgen misionera, porque muchos de los peregrinos que vienen llevan su imagen y así tenemos centenares de ellas en todo el país y en Uruguay, Paraguay y Bolivia", recalcó el sacerdote. Los festejos comenzaron el fin de semana pasado con una peregrinación que llegó de Rosario. Los fieles participaron de las misas que se fueron realizando cada hora, la última de ellas esta medianoche en la que estuvieron unas 200.000 personas. Fuente: Télam.