Miércoles 8 de Febrero de 2006, 10:34

Violencia en Santa Cruz: un policía muerto y treinta heridos

| Fue en la localidad de Las Heras. Unos mil manifestantes fueron a la comisaría a reclamar la libertad de un dirigente. Hubo enfrentamientos. Un suboficial murió: fue golpeado en la cabeza y recibió un disparo

Anoche todo parecía en calma. Los manifestantes decidieron quedarse en los lugares de la protesta —el principal, junto a la ruta provincial 43—, pero sin cortar el tránsito, y los gendarmes permanecían custodiando los yacimientos. Pero el pueblo de Las Heras, en el norte de Santa Cruz, estaba aún conmocionado: apenas unas horas antes, en la madrugada del martes, violentos incidentes entre manifestantes y la Policía terminaron de la peor manera: un suboficial muerto y unos 30 heridos, 5 de ellos de gravedad. Los incidentes se iniciaron a las 23.30 del lunes. Por una orden judicial, la Policía santacruceña detuvo al dirigente petrolero Mario Navarro cuando salía de los estudios de una radio FM. Navarro lidera la protesta de trabajadores petroleros que, con cortes de ruta incluidos, reclaman centralmente un aumento en el mínimo para Ganancias y la anulación de ese impuesto para los trabajadores del sector. La protesta se inició el 23 de enero y se trata de un conflicto al margen de la conducción del gremio. Los manifestantes no sólo impedían el paso en la ruta provincial 43: también el acceso a la planta de Repsol-YPF que, por el conflicto, dejó de producir unos 100 mil metros cúbicos de petróleo. Otras rutas que sufrieron cortes fueron la 16 y la 18, conocidas como "rutas del petróleo" porque llevan a los yacimientos. Navarro fue conducido y alojado en la alcaidía de Las Heras. Hasta allí marcharon unos mil manifestantes que reclamaron su libertad. Enseguida, se produjo un enfrentamiento con la Policía que custodiaba el lugar. Testigos aseguran que la balacera fue infernal. Algunos manifestantes tenían armas de fuego. También palos y barretas de hierro. Con una de ellas golpearon en la cabeza al suboficial Jorge Sayago, que además recibió un disparo de calibre 22 en la clavícula. Gravemente herido, con fractura de cráneo, fue trasladado a un centro asistencial. Pero falleció en el camino. Como consecuencia del enfrentamiento, otros 14 policías resultaron heridos, cinco de ellos de bala. Se trata de los suboficiales Ariel Victoria, Guillermo Morales, Carlos Paredes y Raúl Cardozo. También se encuentra en estado reservado el oficial Raúl Varela. Y 18 manifestantes fueron internados con distintas lesiones, aunque ninguno corre peligro. Los incidentes de produjeron frente a la alcaidía a partir de las 0.30 de ayer. Y se prolongaron durante más de una hora. En medio de la refriega, la Policía dispuso la libertad de Navarro, luego de consultar al juez. Los manifestantes volvieron a la ruta y también volvió la calma. Pero Las Heras había vivido horas violentas. Policías y manifestantes se trenzaron en una verdadera batalla campal. Algunos testigos aseguran que hasta "hubo pelea cuerpo a cuerpo". Ayer, el gobernador de la provincia, Sergio Acevedo, decretó tres días de duelo por la muerte del policía. Y defendió el accionar de los agentes. "Hubo un muerto pero pudieron ser muchos más", dijo. Y aclaró que "la detención de Navarro y el desalojo de los manifestantes se produjo por una orden judicial". También sostuvo que los policías no portaban armas de fuego. El Gobierno afirmó que dispararon balas de goma y gases lagrimógenos para defenderse. Desde Buenos Aires, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, anunció la creación de un Comité de Crisis a pedido del mandatario santacruceño. Y dijo que el hecho era "un homicidio" y no una protesta social. El Gobierno nacional decidió enviar más de 200 gendarmes para garantizar el orden en Las Heras, localidad de 9.300 habitantes, que gira centralmente alrededor de la actividad petrolera. El intendente local, José Luis Martinelli, se comprometió ante los manifestantes a que los gendarmes sólo iban a custodiar las plantas petroleras pero que no iban a instalarse en la ruta 43. Los manifestantes resolvieron entonces seguir en la ruta pero permitiendo el paso de vehículos. A raíz de la medida de protesta, que lleva quince días, las plantas dejaron de producir. Además, el lunes se produjo un importante derrame. Los empresarios culparon a los sindicalistas. Fuente: Clarin.